jueves, abril 06, 2006

Cumpleaños, el día después

Finalmente no fue tan terrible, aunque a pesar de mis intentos no pude pasar desapercibido, ni tampoco mantenerme desconectado del mundo. Son las 3eras personas que me rodean quienes se encargan de darle la sazón a la fecha.

Muy temprano en la mañana mi mamá me tenía de regalo unas cajitas contenedoras de cosas (subliminalmente entregándome el mensaje de ordenar el caos de mi habitación). Al rato mi polola me manda un mensaje de texto al celular. Pocas horas más tarde mi suegra (la mamá de mi polola), que me quiere muchísimo me deja un emotivo mensaje en el buzón de voz del celular. Durante el día un buen amigo se encarga de publicar mi cumpleaños y el de mi profesor de guitarra en un foro que administro, lo que se tradujo en más de 20 mensajes de saludo. Un par de amigos me saludaron via MSN, y en la tarde llega un compañero de oficina con la noticia (que yo había procurado silenciar), lo que se tradujo en otro resto de abrazos, saludos y mejores deseos.

Entonces, finalmente no puedo quejarme, lo haría de puro lleno. Aunque a muchos no les interese realmente, pero hay quienes si lo saludan a uno de corazón, y son ellos los que realmente valen en nuestras vidas.

Tener que bordear el cambio de folio para poder aprender este tipo de lecciones...