Wilma y Alfa, sobreviviendo a la tormenta

Ya ha pasado lo peor. La madrugada de hoy fue lo más cercano que hemos tenido al huracán Wilma, 240 km. la nada misma. Claro que el impacto ha sido notorio, mucho viento, algo de lluvias que te dejan empapado como sopa y evacuaciones a todas las locaciones cercanas a la costa (cercanass entiéndase por un radio de 1 km. aprox.) Afortunadamente el hotel donde nos encontramos alojados está en una subida y en una zona fuera de peligro. Por eso mismo algunos hoteles han refugiado a sus pasajeros ahí, así que imaginen el caos a la hora del desayuno. Y a intervalos regulares se realizan unas "mesas redondas" con la presencia del comandante de barba y otros especialistas en el tema (meteorólogos y cosas así), en las que se le informa a la población los últimos reportes del huracán , de lo acertados que han sido los pronósticos, de lo preparados que estamos para recibir los embates de la naturaleza, y de como una revolución como la local permite que se dé mayor atención a la población.

La ironía de todo es que lo dice quien está bien guarecido en un bunker practicamente antinuclear, quien tiene reservas y está abastecido hasta por lo menos 10 años más, quien no ve la realidad que se empeña en mantener.

Alfa se está moviendo relativamente rápido hacia el norte, sin ganar velocidad. Por lo menos no pasa por aquí cerca. De todas maneras las actividades regulares recien van a reestablecerse mañana.

Lo importante sigue siendo que estamos vivos, aunque eso le interese únicamente a nuestras familias.